MÁS DE 400 CENTROS CONCERTADOS PROTESTAN POR LA SUPRESIÓN DE CONCIERTOS CON UN MINUTO DE SILENCIO Y LA LECTURA DE UN MANIFIESTO
Los 418 centros de Escuelas Católicas de Andalucía secundan esta acción en señal de protesta por los recortes en los conciertos impuestos por la Administración. A las 11 de la mañana de hoy, los centros educativos adscritos a Escuelas Católicas de Andalucía han guardado un minuto de silencio y leído un manifiesto como rechazo a la política de recortes en conciertos educativos impuestos por la Junta de Andalucía.
En total, más de 350.000 personas entre alumnos, profesores, padres y madres, familiares, antiguos alumnos y allegados han protestado de forma silenciosa en los patios de los colegios, portando pancartas en favor de la enseñanza concertada y de la libre elección de centro por parte de los padres. A la finalización del mismo se ha leído un manifiesto.
En la mayoría de centros se ha podido ver el elemento que se ha convertido en la señal de esta reivindicación: lazos naranjas con el emblema “estamos des-concertados”. Algunos centros, de manera coordinada, han decidido trasladar sus protestas a la calle de forma conjunta, desplazando hasta lugares destacados de sus localidades al grueso de sus comunidades educativas.
Esta es la primera de las acciones planteadas por Escuelas Católicas contra la decisión unilateral e injusta de la Junta de Andalucía. La siguiente, está programada para el 7 de Mayo, cuando presenten en el Palacio de San Telmo las firmas que están recogiendo como expresión del malestar que se está viviendo en los centros educativos y en las familias.
MANIFIESTO DES-CONCERTADOS TRAS EL MINUTO DE SILENCIO
Hemos guardado un minuto de silencio por la muerte anunciada de las aulas y unidades concertadas, que el Gobierno del Sr. Griñán quiere suprimir en Andalucía. Aulas con demanda social, actualmente abiertas y en funcionamiento, víctimas del sectarismo ideológico y la irracionalidad política de este gobierno radicalizado de coalición. Hemos guardado un minuto de silencio por la enseñanza concertada andaluza, que está amenazada. Que a pesar de haber intervenido muy satisfactoriamente en la formación integral de millones de andaluces, en la construcción de una sociedad con valores y en la conformación de la identidad andaluza, se ve permanentemente rechazada, denostada y no reconocida, y hasta atacada por sus políticos, a pesar de que muchos de ellos les deben a la concertada y a la educación que recibieron en sus propias aulas, mucho de lo que son; a pesar de que muchos de ellos, lleven a sus hijos a centros concertados, pero impiden a otros andaluces que lo hagan.
Hemos guardado un minuto de silencio por los cientos de niños andaluces que se quedarán sin recibir la enseñanza de calidad que garantizan estos centros y la formación religiosa y moral, de acuerdo con las convicciones de sus padres, que se imparten en esas aulas y que les ha reconocido la Constitución.
Hemos guardado un minuto de silencio por los padres andaluces a los que el Gobierno del Sr. Griñán les ha arrebatado el ejercicio de la libertad de enseñanza, de la libre elección de modelo educativo y centro, y particularmente por aquéllos que al carecer de medios económicos no tendrán ninguna opción de elegir. El Gobierno del Sr. Griñán ha decidido elegir por ellos la educación que deben recibir sus hijos y hasta el centro concreto, como en los más preclaros modelos políticos no democráticos.
Hemos guardado un minuto de silencio por los profesores de los centros afectados y por el personal no docente que perderán sus puestos de trabajo, como consecuencia de esta decisión irresponsable del Gobierno del Sr. Griñán. Hemos guardado un minuto de silencio, en fin, por nuestras libertades. Quienes formamos parte de la Comunidad educativa del Colegio Cristo Rey de Sevilla, (alumnos, padres, profesores, personal no docente y representantes de la entidad titular del centro), educamos en libertad, creemos en la libertad y por eso rechazamos a quienes la cuestionan, la reducen y la minoran, sin motivo.
Pero queremos poner de manifiesto a toda la sociedad andaluza y al Gobierno del Sr. Griñán, que hemos realizado este gesto de guardar un minuto de silencio por última vez, porque desde este momento levantaremos nuestra voz y movilizaremos a la sociedad andaluza para exigir el mantenimiento del concierto educativo de las unidades con demanda social y el respeto de las libertades educativas. El silencio de nuestro desconcierto se transformará en voz, en grito y en reivindicación.